martes, 2 de septiembre de 2008

DROGAS: PRIORIDAD PARA TODOS

El Programa QUIERO SER construye espacios para prevenir

En un diagnóstico participativo concretado en barrios de la Capital, el flagelo de las drogas fue tema prioritario, junto a infraestructura y seguridad, para los vecinos. Además de solicitar la obvia acción policial, reclamaban información sobre las mismas para su prevención, entendiendo que cuanto mas conozcan acerca de la manera en que llegan a los jóvenes y las posibles razones de su consumo, más eficazmente podrán tratar el tema en sus hogares y barrios para la erradicación de las adicciones.
Esto motivó la creación del programa “Quiero Ser”, destinado a capacitar recursos y generar espacios para prevenir el consumo de drogas. Este programa inició en el año 2006 y ya lleva reuniones con 400 docentes y 9700 niños, solo el año pasado estuvo en 39 escuelas, más de 3000 chicos, con 104 docentes capacitados. A partir del compromiso asumido por los docentes y el pedido en el último Congreso Educativo de la provincia, el programa se ha extendido este año a las escuelas de Valle Viejo, Fray Mamerto Esquiú y Capayán, con reuniones planificadas para este mes de Julio en Andalgalá y en Agosto en Pomán

“Construyendo Libertad para los jóvenes”
En estos espacios así llamados, no solo se habla e informa acerca de los tipos de droga y sus efectos, también se habla de temas que mejoran las relaciones parentales. La expresión de la afectividad, los estilos de padres, la comunicación dentro de la familia, son algunos de los temas que provocaron entusiasmo entre padres y chicos, al encontrar un modo de trabajo y los temas que muchas veces no saben como abordar puertas adentro de los hogares.
En estas reuniones, un hijo le confesaba a su padre, lo triste que se sentía al ver que tomara tanto alcohol en la sobremesa de los domingos incluso, provocando la reflexión del mismo y un compromiso de cambio. También una madre comentó como había crecido en la cercanía con sus hijos al expresar más su afectividad con los mismos.
Algunos padres desean conocer el formato, el envase de las drogas, ya que al no reconocerlas no podrían identificarlas para evitar que sus hijos posean o sean obligados a su consumo.
“Quiero Ser” es una expresión de deseo de cambio y construcción de un nuevo modo de ser, que busca superar el fatalismo social de varios sectores, demostrando que los cambios son posibles si se encuentran las herramientas y los recursos que nos permitan comunicarnos y prevenir el flagelo de la droga.

Drogas: admitir es prevenir

Hace tiempo que las noticias sobre el consumo de drogas en las escuelas se sucede en las páginas de los diarios, sin embargo las instituciones suelen tener problemas para admitir la presencia de este flagelo puertas adentro de las aulas, ya que sería un fuerte golpe a la imagen social de la escuela y un cuestionamiento a la acción de los docentes respecto del tema.
Sin embargo, la droga esta presente en la escuela como en todos los espacios sociales, sin distinción de clases. Aunque las estadísticas no señalan a la escuela como un espacio fuerte de consumo o adquisición, los alumnos toman contacto con las mismas desde las drogas “sociales”: el alcohol y el cigarrillo, que sin duda son los mayores flagelos.
Los equipos de conducción no tenían hasta aquí recursos técnicos y profesionales que les permitieran asumir el problema, admitir la posibilidad que la droga haya llegado a la escuela. Pero se encontró la predisposición para informarse, aprender y actuar al respecto.
Ahora, los docentes capacitados por el Programa “Quiero Ser” están preparados para construir espacios para el tratamiento del tema y compartir el trabajo con los padres y los chicos, con acciones que permitan el diálogo sincero y constructivo. En 4 años, el programa ya capacitó más de 400 docentes y solo este año ya estuvo en 39 escuelas, dejando suficiente capacidad instalada para que se admita el problema, como primera medida de prevención.

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